no quiero escucharte.
El frío de la noche y la soledad
hablan,
hablan sin parar de mi cuerpo inerte,
abandonado por la suerte.
Nada queda, tras la muerte,
vagos recuerdos tristes de tristes
vidas mal vividas.
Olor a sudoración, a desolación,
a pobre…
No soy libre ¿alguien me
entiende?¿quien me escucha?
Amor, fue de este mundo,
quien me abandonó.
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